Las fuertes lluvias han causado inundaciones en la región norte de Emilia-Romagna en Italia, dejando nueve personas muertas y varias desaparecidas. Alrededor de 10,000 personas han sido evacuadas, y algunas tuvieron que ser rescatadas de los tejados en helicóptero. Catorce ríos han desbordado, afectando a 23 localidades. El Gran Premio de Fórmula 1 de Emilia-Romagna que se iba a celebrar fue cancelado debido a las condiciones climáticas.

Las fuertes lluvias contrastaron también con la fuerte ola de calor registrada durante el mes de Julio en Europa, en donde se alcanzaron temperaturas máximas históricas, con el termómetro alcanzando incluso los 48°C en algunas zonas del viejo continente, quedando en evidencia una vez más las grandes consecuencias del cambio climático.