Respuesta:
Durante el pregrado siempre me llamó la atención los alcances y limitaciones de muchos de los supuestos en ingeniería civil, por lo que constantemente quise saber que hay más allá de estos. Así también, la mecánica de suelos es una disciplina joven con mucho por estudiar y donde estos supuestos resultan muy relevantes. Por otro lado, para mi suerte tuve muy buenos profesores (Ramón Verdugo y Claudio Foncea, entre otros), quienes con sus cátedras – y en especial las actividades de laboratorio – fueron fomentando mi inquietud por investigar e ir un poco más allá en el conocimiento. Por lo mismo, resultó natural tomar el postgrado de MSc en Ingeniería Geotécnica de la Universidad de Chile una vez finalizado el pregrado.
Posteriormente, con los años trabajando en la industria esta inquietud seguía presente, y a la vez los proyectos se volvían cada vez más desafiantes e interesantes. Notaba que las herramientas que hasta el momento había adquirido y desarrollado necesitaban un “upgrade” técnico, especialmente en la parte de modelación numérica. También tuve la suerte de estar en un entorno donde algunos de mis colegas tienen estudios de postgrado en Chile y otros en el extranjero, por lo que el ambiente daba las condiciones para pensar en esto.
Por lo anterior, empecé a ver la posibilidad de estudiar fuera de Chile, revisando distintos programas, enfoques y decidí el lugar. Luego, empecé a estudiar las alternativas de financiamiento – especialmente Becas Chile – y decidimos con mi familia embarcarnos en esta aventura.
Con lo anterior opté por el MSc en Soil Mechanics and Engineering Seismology en Imperial College. Durante el desarrollo del programa se abrió la posibilidad de continuar con un PhD en un tema de mi interés. De esta forma, vimos nuevamente las alternativas de financiamiento, y considerando la experiencia adquirida de haber vivido un tiempo en la ciudad, además del respaldo de la familia y los profesores, di inicio al programa de doctorado al poco tiempo de finalizado el master.
Respuesta:
La experiencia profesional ha sido clave. Complementando lo señalado previamente, trabajar en la industria me ha ayudado a dimensionar ciertas limitantes y restricciones de los métodos que muchas veces utilizamos en la práctica ingenieril. Por otra parte, la experiencia profesional me ha permitido madurar conocimientos e ideas, además de “aterrizar” la teoría, lo que lleva a que el enfoque en muchos de los problemas sea tangible. Puede que trabajar en la industria mucho tiempo te haga perder algo de “habilidades” algebraicas y facilidad para cálculos numéricos en lo que respecta a teoría pura, sin embargo, se gana experiencia en lo práctico y en el adquirir ordenes de magnitud de soluciones, orientando tu modo de pensar hacia soluciones factibles y reales, alejándose un poco de lo puramente abstracto.
En particular, siempre tuve la inquietud de continuar con estudios de postgrado una vez finalizado el MSc de la Universidad de Chile; sin embargo, el trabajar en la industria permitió darme cuenta de la amplia gama de problemas prácticos y aplicados a las necesidades de nuestro país que deben seguir investigándose para dar soluciones más eficientes.
Respuesta:
Mi tema de investigación se basa en estudiar el comportamiento sísmico de tranques de relaves mediante elementos finitos. La idea inicial consiste en calibrar parte de los ensayos sobre arenas de relaves que efectué para mi tesis de máster en Chile utilizando un modelo constitutivo avanzando llamado “Bounding Surface Plasticity Model” basado en el modelo original de Manzari & Dafalias (1997) y modificado por otros autores (Papadimitriou & Boukovalas, 2002; Taborda et al., 2014) a fin de mejorar las simulaciones de la respuesta cíclica.
El objetivo es simular la respuesta cíclica observada en depósitos de relaves y evaluar como la variación de algunos parámetros, – geotécnicos y de operación del tranque, – puede modificar la susceptibilidad a presentar problemas de estabilidad estática y sísmica.
Para mi tema de investigación, el hecho de haber trabajado en la industria en temas similares ha resultado vital, especialmente respecto a los supuestos que muchas veces se utilizan en la práctica ingenieril.
4. ¿Qué similitudes y diferencias has podido distinguir entre tus estudios en Chile, y en el extranjero?.
Respuesta:
En general no he encontrado diferencias sustanciales respecto a los cursos teóricos dictados entre los programas de postgrado de Chile con los del extranjero. Quizás el hecho de que cada programa enfoca parte de sus módulos en algunas necesidades locales como el efecto de la temperatura en arcillas u offshore engineering, para el caso de UK, o los problemas de suelos salinos y alofánicos, para el caso chileno, puede resultar como “similitud – diferencia».
Los programas de postgrado en Chile entregan muy buenas herramientas para desarrollarte en la industria local, y a la vez si deseas seguir especializándote fuera de Chile.
Si tuviese que destacar alguna diferencia, ésta sería el estrecho vínculo que existe entre la academia y la industria. En los programas de postgrado, especialmente en UK, la industria reconoce donde se forman sus futuros ingenieros de proyectos y consultores, por lo que muchos de los temas de tesis y algunos proyectos de investigación están ligados a problemáticas actuales que se dan en proyectos. Del mismo modo, la industria actúa como sponsor de algunos programas, charlas y eventos. Según tengo entendido, este tipo de nexos se ha ido potenciando en nuestro país durante el último tiempo.
Respuesta:
Lo que más he disfrutado es la posibilidad de compartir ideas y conocimiento con profesionales de distintos países y background técnico. Del mismo modo, tener la oportunidad de interactuar con destacados académicos (más de algún profesor con Rankine Lecture) o reconocidos profesionales y ver que enfoque le pueden entregar a tu tema de investigación. Por el lado familiar, el hecho de vivir en una ciudad cosmopolita y que mis hijas tengan acceso a una cultura rica resulta impagable.
Lo más difícil son las distancias. A pesar de que tecnologías permiten comunicarte a diario con tu familia y amigos, la presencia de las redes de apoyo es algo que se extraña, pero finalmente uno se termina adecuando con el tiempo.
Respuesta:
Mi consejo sería que si tienen la oportunidad de estudiar o inclusive trabajar fuera de Chile, traten de tomarla. La experiencia es impagable desde el punto de vista personal y profesional. Te abre un mundo de posibilidades que difícilmente se puede dar estando únicamente en Chile. Aunque claramente te mueves de tu zona de confort, la experiencia resulta muy enriquecedora en el corto y mediano plazo.
David Solans es Ingeniero Civil de la Universidad de Chile, y actualmente cursa sus estudios de Ph.D en el Imperial College London, en UK.
Entrevista por Rafael Iglesias